jueves, 21 de marzo de 2013

Susana y el Gobierno de Concertación Política y Social por Lima, que debe inaugurarse en esta nueva etapa


El resultado de la revocatoria, consolida en el Gobierno de la Ciudad de Lima a Susana Villarán. Nos dice, de un lado, que la mentira, los intereses subalternos y las argucias legales han sido recusados por ciudadanas y ciudadanos de esta urbe, y, de otro lado, que el espíritu democrático y la apuesta por tener estabilidad y transparencia en la conducción de la ciudad, salieron a flote. Lo que está muy bien. Sin embargo, nos pone, tanto a ciudadanas y ciudadanos como a Fuerza Social y a los militantes de la Izquierda Democrática, frente a nuevos retos:

El primero, a mi modo de ver, es poder hacer un gobierno de concertación que permita darle viabilidad al gobierno de la comuna limeña. Esta concertación, acuerdo político, sería en primer lugar con el PPC sin descontar posibles acuerdos con otros sectores; en la medida que es necesario cumplir aquello de gobernar con todos y para todos. Sin descuidar el concertar y fomentar la participación y toma de decisiones de las Organizaciones Sociales de Base en aspectos que sean de su interés.

Sigue en la lista la necesidad de poner a tono a quiénes cubran los puestos de los regidores revocados y, sobre todo, encargarles aspectos para los que tengan manejo y experiencia suficiente, de modo que más que retrocesos hayan avances concretos.

El punto central, es ¿cómo lograr reconectar? tanto a la alcaldesa como a los movimientos y partidos de Izquierda con el sentir, las expectativas y legítimos intereses de los sectores llamados “C”, “D”, “E”, conocidos por nosotros como sectores populares, donde se ha experimentado un franco retroceso. Una manera podría ser impulsar, promover programas y políticas sociales que den cuenta, a los menos favorecidos de la ciudad, quiénes son la mayoría, que el gobierno municipal tiene en ellos y para ellos una opción preferencial.

De la manera como se resuelvan estos retos - entre otros – dependerá de que la gestión de la Alcaldesa de Lima demuestre a quiénes confiaron y confían en ella que optar por el NO fue lo mejor. Al tiempo que marcará la pauta para poder recomponer y trabajar por la unidad de los movimientos y partidos de la izquierda democrática.

En la medida que ya es hora que la izquierda democrática peruana recupere el rol central y gravitante que debe tener en la política peruana, creo que Susana y Fuerza Social pueden contribuir decisivamente en eso, pero deben convencerse; y este último proceso nos da muchas luces de que no pueden gobernar solos, ni son los únicos.

Ampliar la concertación, consulta y el apoyo técnico a otras personas, profesionales, líderes sociales, fuerzas y sectores de la izquierda democrática, junto a todas las fuerzas, vengan de izquierda o derecha, que quieran trabajar por Lima es el imperativo hoy.       

lunes, 11 de marzo de 2013

Claro Oscuros de la campaña por la revocatoria a la Alcaldesa de Lima


La campaña por la “revocatoria”, nos vuelve a mostrar una Lima dividida, atrapada, en lo subjetivo, por una manera de expresar las cosas que  tiene poco que ver con la realidad, esta, no es una disputa entre “cholos” y “blancos” y, menos, entre “pobres” y  “pitucos”. Todo eso es, discriminación, venga de donde venga, salga de dónde salga. Lo que está en juego no es otra cosa que una manera distinta de conducir, gobernar Lima.

La disputa, ciertamente, está dada entre: Unos, que promueven el SI, pero, no tienen claro, qué hacer con Lima, ni les interesa, realmente, cómo marcha; ni tienen capacidad ni autoridad moral para conducirla, ni representan a nadie y, más bien, han capitalizado el sentimiento de  “que se vayan todos “, que existe, lamentablemente, en, gran parte, de las ciudadanas y ciudadanos, que han visto en éstos últimos 22 años, el que sus demandas y legítimos reclamos se posterguen y, sean siempre, unos pocos, los más beneficiados. Otros, que luchan por que gane el NO  y, con ello, asegurar la continuidad de una conducción, básicamente, ética de la ciudad, lo que tienen como principal virtud. Además, de, ser conducidos por una mujer política y éticamente intachable – baste decir que hoy están abiertos procesos de investigación a dos regidores de su lista, en una comisión que preside la oposición -  pero que, además, está tocando intereses particulares teniendo como bandera ordenar el transporte, el comercio de alimentos, etc.

Tengo la impresión que lo primero que debe aparecer en nuestras conciencias el día de la votación es: “a quién, quiénes, se les hace el juego”; “Que conducción para Lima estoy priorizando” al optar por el SI o por el NO.

No es, a mi modo de ver las cosas,  lo subjetivo, lo que debe primar, veamos lo objetivo, lo sustantivo del proceso, creo que  el optar por el NO, si bien garantiza la continuidad de una gestión limpia, significa que, entre otras cosas, se respeta la voluntad popular, que dijo, en su momento, queremos que Lima sea conducida por una mujer honesta y  con capacidades para gestionar la ciudad y ponerla al alcance de todas y todos; ciertamente, el optar por el NO, tiene relación, también, con que el equipo que hoy, legítimamente, gobierna la ciudad, haga cambios, los necesarios, para que la ciudadanía participe, decida y esté mejor informada de lo que se hace. 

Lima y quienes viven en ella no pueden poner por delante, la inestabilidad, la incapacidad, la mentira y el desgobierno, que podría ocurrir, si triunfa el SI.

Susana, y hay que decirlo abiertamente, es, hoy por hoy, la persona, que legítimamente, debe seguir conduciendo la Gestión de Lima. Ciudad que merece:

v  Ser conducida por una mujer que ha demostrado a lo largo de toda su vida estar en contra de todo tipo de discriminación, especialmente la racial o la de género.

v  Ser Gobernada por una mujer capaz y  que, legítimamente, fue elegida para gobernar la ciudad.

v  Qué el transporte público, la distribución y comercialización de alimentos, el arte, la cultura, la creación de espacios públicos, para todas y todos y los programas sociales, sean abiertos, transparentes, se realicen de manera adecuada y sigan beneficiando, a todos, especialmente a los que menos tienen.

Por lo tanto, los resultados de las encuestas, publicados, en éstos días: Ipsos Perú: Sí 55% y No 45%; Datum: Sí 53% y No 47%; CPI: Sí 54.7% y No 45.3%; y GFK: Sí 50% y No 40%. No deben ser más que un indicador, en la medida que no sabemos, qué intereses podrían representar.

Los Claro Oscuros de este proceso son importantes, no sólo por qué, asistimos a un acto que jurídicamente, en estricto, es improcedente, sino por qué hay intereses, entre quienes propugnan el SÍ, que no podemos avalar.

Que los claro oscuros del proceso de “revocatoria” terminen, depende, felizmente, de ciudadanas y ciudadanos que no dependen de intereses particulares y subalternos sino, más bien, del dictado de sus conciencias y de su vocación democrática.

Votar, Optar por el NO, nos devolverá, la capacidad - desde lo consciente, lo objetivo - por mantener el espíritu democrático y de fortalecimiento de las instituciones, camino por el que debemos transitar al tiempo que nos dará la posibilidad de decirles a los desestabilizadores que Lima, sus ciudadanas y sus ciudadanos pedimos cambios pero no estamos dispuestos a validar acciones incorrectas y poco constructivas.

Tenemos, la posibilidad de transformar la noche, en día, hagamos del próximo domingo uno en el que la primavera democrática, se evidencie, asome, como asoma la mañana, la luz, el resplandor.

Digamos, NO, porque confiamos en Susana y ella confía en nosotros y hará, lo necesario, para que Lima sea de todas y todos y porque los claro oscuros que hoy la amenazan se disipen.